Llego a la panadería en busca de unas deliciosas medialunas calentitas… de acuerdo a la temperatura que acabo de referir se imaginarán que era muy temprano a la mañana… justo delante de mí un señor de buen ánimo comentaba que él debería ser panadero porque se levanta cinco y media… sería ese un dato revelador?? Será que la vocación de Manolo huele a medialuna? Alerta desde el alba quien sabe mi hijo se esté preparando para fundirse con harinas y levaduras… Salgo de la panadería con hijo y ojeras a cuestas y atestiguo como dos jóvenes se disponen a proveerse el desayuno… su noche devenida día aun no terminaba… y entonces comprendí… al igual que esos jóvenes, mi sol naciente… jamás se había dormido… ese dato lo asemeja más a los festivos y alborotados adolescentes que al panadero (que se supone debe descansar preparándose para su laboriosa jornada).
NOTA: Pienso… hay más de una madre que durmió de a ratos.